Descargar este documento en formato Pdf
-contemplar ante mí al Dios vivo, eterno, infinito y omnipotente,
-dejarme consumir por su presencia,
-mirar a Dios como si no existiera nada más,
-contemplarlo con admiración y asombro,
-admirar, fascinado, su amor,
-reconocer su deseo de habitar en mí y poseerme,
-gozarme de pertenecerle exclusivamente,
-reconocerme creatura ante el Creador,
-concentrar todo mi ser en un acto puro y silencioso de amor a Dios,
-convertir el silencio en expresión de mi amor y abandono en Dios,
-abrirle el corazón para que lo inunde su misericordia,
-reconocerme infinitamente amado por Dios,
-aceptar que su amor es personal, absoluto e incondicional,
-ofrecerle todo a Dios,
-entregarle incondicionalmente mi alma,
-dejar que Dios haga infinita mi ansia de amarle,
-olvidarme de todo lo que no es Dios,
-mantenerme plenamente vivo, en silencio, ante Dios en el momento presente,
-ofrecer a Dios mi tiempo, mi cuerpo, mi vida…,
-darle cuanto soy y tengo,
-mantener la mirada a Dios en la oscuridad,
-suspender el pensamiento y la imaginación,
-entregar mi voluntad a la de Dios,
-aceptar que no puedo nada ante el Todopoderoso,
-agradecer todo lo que me hace insignificante,
-reconocer que no soy nada ante el que es todo,
-hacerme ínfimo como un grano de arena,
-huir de cualquier mirada sobre mí mismo,
-olvidar cualquier preocupación, prisa o urgencia,
-renunciar a mi mirada y mis criterios, para que solo exista en mí la mirada y el criterio de Dios,
-acoger todo lo que soy y tengo como don inmerecido de Dios,
-aceptar apasionadamente la voluntad de Dios,
-disponerme a todo como respuesta amorosa al amor de Dios,
-olvidarme del pasado,
-despreocuparse del futuro,
-aceptar todo en fe,
-acallar voces, sentimientos y pasiones,
-olvidarme de mí mismo,
-renunciar a resultados y éxitos,
-quitarle importancia a los problemas y preocupaciones,
-silenciar mis necesidades y gustos,
-confiar a todos y todo a la Providencia,
-empapar de la presencia de Dios todas mis actividades,
-renunciar a compararme con los demás,
-acoger la cruz sin razonamientos ni justificaciones,
-abrazar el mundo entero, en silencio, y ponerlo ante Dios,
-ofrecer a Dios mi deseo universal de amor y salvación,
-dejarme consumir por el amor a los demás más allá de frutos y sentimientos,
-hacerme uno con los más pobres y abandonados,
-rechazar cualquier culpabilización propia o ajena,
-esperar el cielo como mi única meta.
Oración de adoración
Dios todopoderoso y eterno:
Te adoro con todo mi ser. Me pongo ante ti, pobre y desnudo de todo, reconociéndote como Señor absoluto del mundo y de la historia, de mi ser y de mi vida.
Te adoro, Padre, creador del mundo, y me abandono completamente a tu providencia, que todo lo abarca y lo puede.
Te adoro, Jesús, Verbo eterno de Dios, que te has hecho nuestro hermano, y me entrego a ti para que me identifiques plenamente contigo.
Te adoro, Espíritu Santo, fuente inextinguible del amor divino, y te ofrezco mi alma para que la consumas con tu fuego y conviertas mi vida en un continuo acto de amor ofrecido a Dios para su gloria y la salvación del mundo.
Porque tuyo, oh Dios, es el reino, tuyo el poder y la gloria por los siglos de los siglos.
Amén.